Primero vamos a aclarar: Venus no tiene luna, pero eso no quita que durante mucho tiempo haya existido una discordia sobre el tema.

Créditos: NASA (con un mínimo retoque)

Las primeras afirmaciones de la supuesta luna venusina datan de 1645 por el astrónomo italiano Francesco Fontana. Al año siguiente lo volvería a ver. Pero su anuncio no generó repercusiones.

Francesco Fontana

En 1672 Giovanni Cassini afirmó ver el satélite de Venus. Ocho años después lo encuentra nuevamente y hace público su descubrimiento.

Vale aclarar que Cassini en 1650, con tan sólo 25 años, fue nombrado profesor de astronomía en la Universidad de Bolonia. Sucediendo al discípulo de Galileo, Bonaventura Cavalieri. En 1671 descubre Japeto, y al año siguiente a Rea, dos lunas de Saturno. En 1675 descubre la división de los anillos de Saturno que llevan su nombre. En 1684 descubre Dione y Tetis, dos lunas nuevas de Saturno.
Dicho de otra manera, Giovanni Cassini tenía peso. Mucho peso.

Giovanni Cassini

Obviamente acá la cosa se picó y se armaron dos bandos . Una nueva grieta en el círculo astronómico.

La luna venusina obtuvo un nombre provisorio: Neith, madre de todos los dioses.

El satélite fue visto varias veces a lo largo de los años, incluso por respetados científicos del tamaño de Lagrange que lo reportó 3 veces en 1761.

En total, se reportó un mínimo de 36 veces por 12 científicos.

En 1768, William Herschel (descubridor, entre otras cosas, de Urano) afirmó que no logró verlo.

Finalmente, en 1887, la Academia Belga de Ciencias publica un estudio en el que se refuta la existencia de Neith y del satélite de Venus, demostrando que todos los registros realizados hasta la fecha eran de estrellas cercanas ópticamente a Venus.

De todas formas, la última observación visual reportada de la teórica luna venusiana se produjo el 13 de agosto de 1892, cuando Edward Emerson Barnard registró un objeto de magnitud 7 cerca de Venus. No existe una estrella en la posición registrada por Barnard. Así que nunca se supo lo que vio, pero la tesis de Neith ya no tenía credibilidad científica.

2002 VE68

Este asteroide descubierto el 11 de noviembre del 2002 orbita al Sol de tal forma que el perihelio (el punto de la órbita más cercano al Sol) está dentro de la trayectoria de Mercurio y en el afelio (el punto de la órbita más alejado al sol) alcanza la trayectoria de la Tierra.

¿Y qué es tan especial de 2002 VE68?

Que tiene una resonancia orbital con Venus de 1:1. Esto significa que tardan el mismo tiempo en orbitar al Sol. Eso no es casualidad, es la influencia gravitacional entre ambos.

Esto hace que 2002 VE68 sea lo más cercano que Venus tiene a un satélite y quizás, solo quizás, es lo que vieron tantos científicos y confundieron como una luna.

Fuente: wikipedia.org, egiptologia.org